Buscar este blog

lunes, 22 de marzo de 2010

EL SÍ DE LAS NIÑAS

Hace un rato, antes de irme a dormir y volver a levantarme convencida de que una buena ingesta de hidratos de carbono con su cigarrito post pecado mortal me ayudarían a conciliar, hablaba con mi hermana, madre ella.
Se reía, la muy bruja, de la forma irónica con la que le narraba mi último desastre emocional y absolutamente paralelo a la vida real porque yo, lo que tengo, es que vivo dos vidas la mía y la de mi hemisferio derecho, que es muy díscolo.
En mi intento por atribuir, a determinadas secuencias vividas recientemente y que no vienen al caso, significados reales que descartasen la necesidad de tratamiento con antialucinógenos, toqué algún botón que a ella le recordó un par de conversaciones con sus preciosas hijas de 6 y 9 años. La mayor le preguntaba hace un par de días si estaba mal "exagerar un poco las cosas cuando las cuentas para hacer más risas o para dar más pena o para que te escuchen como hacéis vosotras cuando habláis" -en referencia a la hermana y servidora-. Brillante reflexión para una niña de 9 años que ha decidido no hacer la comunión este año porque no le gusta lo que cuentan en catequesis... ya apuntaba maneras cuando lo decidió ¿verdad?
La segunda charla la protagonizaba la pequeña. Su abuela, acusándola de algo que no había hecho, amenazó con morderla el culo. Y ella, asertiva como la madre que la parió, amenazó a su vez con un rotundo "abuela, espero que no hagas algo de lo que te puedas arrepentir". La madre hermana asertiva, preocupada por si su hija no se estaría pasando con sus enfoques, la interrogó con respecto a la conversación. Respuesta de la niña "es que si la abuela descubre que yo no he sido y antes me ha mordido el culo se va a arrepentir de haberme hecho daño".
Ahí es nada. Recuerden, 6 y 9 años.
Conclusión de la en realidad amiga hermana madre asertiva preocupada y guapa como ella sola y la pularda: nuestra generación es probablemente la que más está sufriendo de la historia.
Es así. Nos ha tocado bailar con la fea. Simplificando, claro. Pero es así. Pocas dudas existenciales tenían nuestros padres, incluso los más acomodados que, si querían darle alas a sus pensamientos, no podían por la cosa de la dictadura. Así que ya tenían contra quien luchar. Los que son hijos en edad de socializar ahora lo son de padres que, como nosotros, ya saben lo importante que es hacerlos fuertes, hablar con ellos y, sobre todo, conocen perfectamente el significado de la palabra autoestima.
Nosotros somos la generación de "cuidado que hay ropa tendida". De política no se habla. El sexo es pecado y tampoco es tema de conversación. Ni el dinero. Ni los sentimientos. Ni tus padres se morreaban delante de ti. Ni se abrazaban. Y a ti, como mucho, igual te abrazaba tu madre, pero luego la jodía te daba con la zapatilla. Y las monjas te machacaban si preguntabas algo que no sabían convirtiéndolo en inconveniente. Y los chichos, en algunos casos, no iban contigo al cole. Y tú no entendías nada pero seguías creciendo. Y creciste, en mi caso no mucho, cierto. Pero sigues sin entender nada.
Hace años que no pienso en los hijos. Supongo que saber que no tienes enfrente a la persona con la que te gustaría tenerlos, contribuye a desplazar el pensamiento. Cada vez que hablo con ella, con mi lugar seguro, me pregunto cómo sería mi vida si los tuviese y ahora en lugar de levantarme a escribir en un blog me levantase a poner un termómetro. Y me gustaría educarlos. Hacer eso bien. Al menos hacer eso bien en la vida. Ver crecer a unos enanos sanos, listos, sensibles con los que según me cuenta mi amiga hermana puede !hablar de todo con otra forma, con menos reflexión, con menos puntería, callando alguna cosa que todavía no toca, dándo alguna vuelta, pero de todo al fin...".
Doy gracias por tener cerca una familia tan maravillosa. A la mía, también le doy gracias por infinitas cosas más. Pero si algún día formo una, trabajaré duro para que mis hijas no sufran como perras sólo por enfrentarse a la vida teniendo que decir sí casi todo el rato, especialmente si son niñas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario